jueves, 19 de febrero de 2015

La mamma morta


"Vivi ancora! Io son la vita!" 


"Mataron a mi madre en la puerta de mi alcoba; 
moría y me salvaba. Después, en plena noche,
 anduve errante con Bersi, 
cuando de repente un lívido resplandor apareció 
y aclaró ante mis pasos el oscuro camino. 
¡Miro! ¡Mi hogar estaba en llamas! 
Así me quedé sola. Y a mi alrededor, nada. 
¡Hambre y miseria! ¡La necesidad, el peligro!
Caí enferma. Y Bersi, buena y pura, traficó, 
mercadeó con su belleza para salvarme. 
¡Llevo la desventura a quien me quiere!

Fue entre aquel dolor como el amor llegó a mí. 
Una voz llena de armonía me dijo: "¡Vive todavía! 
¡Yo soy la vida! ¡En mis ojos está tu cielo! 
 ¡Tú no estás sola! ¡Yo recojo tus lágrimas! 
¡Yo me encuentro en tu camino y te socorro! 
¡Sonríe y espera! ¡Yo soy el amor! 
¿Alrededor todo es sangre y barro? ¡Yo soy divino! 
¡Soy el olvido! ¡Soy el dios que desciende de las alturas 
y hace de la tierra un cielo! ¡Ah! 
¡Yo soy el amor, yo soy el amor!""

(De la ópera "Andrea Chénier". Traducción de Kareol)











2 comentarios:

Mariblán dijo...

Barbaridad sublime e inconmensurable. Tanto el aria como la Callas.

Pteromari dijo...

Sí, tanto el continente como el contenido.

Dicen por aquí que la Callas era muy miope y se aprendía las óperas enteras (todos los papeles, todas las partituras, toda la música...) porque aunque mirase al director, no lo veía. Y así, como no tenía que mirarlo, se podía dedicar a interpretar su papel.
¡Y cómo lo interpretaba!

A mí no me gusta Tom Hanks, pero debo reconocer que en esta película y en esta escena, sobre todo, me llegó a emocionar.